Elena, Ana,
Carmen, Antonio, Martin, Felipe, Johnson, Dimiter, Joao, Jan Sun, Vilislav, … Horas
después, Manuel, Miguel Ángel, Pedro Jose… Son muchas las personas afectadas
por la psoriasis. Alrededor de 125
millones las que de forma grave, menos grave o leve, sufren de esta afección en
el mundo.
Hoy he tenido
el enorme placer de conocer, a través de las redes sociales a much@s de ell@s (en Psoriasis 2015 Español en Facebook). Personas
que como yo, intentan que el día a día de su enfermedad sea lo más llevadero y
positivo posible. Y como siempre digo, la motivación pasa a ser una de las
principales armas con las que contamos. Además de ser aquella que nadie ni nada
nos puede arrebatar.
Me alegra leer
que la mayoría de nosotros, tenemos la formidable suerte de contar con el apoyo
de familiares y amigos. Esto nos hace no solo afortunados, si no que demuestra
una absoluta tolerancia y aceptación de la psoriasis como una dolencia más del
ser humano y no como algo antisocial, aislado o rechazado.
Rechazados,
seguro que nos hemos sentido cualquiera de nosotros alguna vez. Es duro como decía
en entradas anteriores el momento en que te señalan, te preguntan, incluso te
invitan a irte de algún sitio público (tipo piscina, sauna o gimnasio...). Aun
sabiendo que la psoriasis es una enfermedad crónica, que se manifiesta en
brotes, los pacientes mantenemos la fuerza para luchar y hacer que nuestra
vida, sea de los más normal posible. Con nuestras alegrías, tristezas, pros y
contras, pero tratando de que nuestra enfermedad no la protagonice. Mercedes Garaikoetxea,
Presidenta de la asociación vasca de afectados de psoriasis, escribió en uno de
sus artículos “La psoriasis no mata, pero tiene efectos
que arruinan la vida de quienes lo padecen.”
Posiblemente,
como hoy comentábamos, muchos de nosotros habíamos evitado durante años usar pantalón
corto, camisetas de tirantes, o demás prendas de ropa que mostrasen esa piel
que habitamos. Las teníamos en el armario como las ropa de aquella época en que… Personalmente, tras más de quince
años de convivencia con ella, aun le pregunto a ratos si quiere mostrarse. Mejor
corto o largo?, o que dirán si en el gimnasio me ven.
Casi el 70 por
ciento de las personas con psoriasis aseguran que síntomas como el dolor, el
picor, las grietas y la descamación afectan a su vida diaria y un 36% de ellos
admite que a causa de esta enfermedad presenta falta de autoestima y un 24%
sufre tristeza.
En estos
momentos, experto ya en esas miradas y preguntas, mi NO de antes, ya se queda únicamente
en duda, porque finalmente, acabo luciendo mis piernas con psoriasis. No me harán
un contrato como modelo de piernas, pero al menos, podre hacer deporte sin
pasar calor. Y esa sensación, de libertad… como la Mastercard, no tiene precio.
Buen fin de semana a tod@s!!!!
Hola Antonio! Que identificada me siento con tu post. Mi psoriasis me acompaña hace 20 años y ahí estamos...como bien dices motivación, y esperanza para encontrar ( de una vez) un tratamiento eficaz en el tiempo. Ánimo!
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